Como conservo mi tabaco.

Para conservar el tabaco utilizo recipientes de vidrio color oscuro con cierre hermético de goma y que posee un alambre para mantener apretada la tapa, lo mismos son para uso en la cocina y se encuentran en la mayoría de los bazares. Si el tabaco es alguno que suelo fumar a diario, lo pongo sin sacarlo del pouch dentro de un recipiente de estos y lo mantengo en el mismo, solo lo saco para cargar la pipa. Si es algún tabaco que fumo durante la semana pero no a diario lo retiro del pouch o la lata y lo depositó dentro del recipiente. Luego introduzco el humidor, siempre me ha dado buen resultado usar como humidor el envase de un rollo de fotos, a la pequeña tapa del mismo le efectúo cerca de diez orificios con una aguja de costura no muy fina, dentro introduzco un algodón humedecido con agua de mesa; nunca utilizo el agua de la canilla debido al cloro que posee. Apróximadamente cada cinco dias es conveniente revisar el estado del tabaco guardado y el algodón para controlar que el tabaco no se pase de humedad, en este caso retirar el humidor por un dia o más dependiendo del grado de humedad producido por el algodón en el recipiente y dejarlo destapado por unas horas, posteriormente al volver a poner el humidor controlar que el algodón no se haya secado, si esto ocurre volver a humedecerlo; a medida que uno va empleando este método la experiencia hace que el mismo funcione bien.


Este es un método personal y de ninguna manera se busca polemizar con otros métodos empleados con éxito por otros pipafumadores.

Hay pipafumadores que usan un pedazo pequeño de ladrillo humedecido en lugar del algodón.
Otros usan agua destilada o agua destilada con vinagre en el ladrillo o el algodón.
Se de otras personas que humedecen el algodón con whisky o ron.

Pero lo que no parece aconsejable es el uso de lechuga, acelga o cáscara de papa para conservar el tabaco, las mencionadas dentro del tarro luego de algunas horas comienzan un proceso de descomposición. La cáscara de frutas como el limón o la naranja aunque ayudan a mantener la humedad también se descomponen y además cambian el sabor original del tabaco, esto último también lo hacen el whisky y el ron.
El método es para evitar que el tabaco se seque pero también funciona para recuperar un tabaco que se ha secado.

Si no se posee aire acondicionado en verano no es aconsejable dejar el tabaco en lata en la misma luego de abierta a menos que se piense consumirlo en la semana, ni dejar el tabaco luego de retirarlo del paquete en un recipiente de lata, el calor la afectará y contribuirá a secarlo más rápidamente.

Hace un tiempo leí que había pipafumadores que para tratar de recuperar un tabaco seco introducían el mismo en un recipiente y lo dejaban cerca mientras tomaban una ducha; el método humedecía el tabaco pero agregaba aromas y sabores del jabón y el champú utilizado.

Un buen método para humedecer tabaco que se ha secado es el de Georg Jensen (Mac Baren Tobacco):
Se retira de la lata o bolsa el tabaco seco y se pone en una bolsa de plástico bastante más grande que el tamaño del envase a los efectos de observar con claridad la cantidad de vapor que ingresará dentro.
Se pone a hervir agua en una pava o caldera.
Cuando el vapor empieza a formarse, se debe colocar la abertura de la bolsa plástica de forma que el vapor que despide el pico de la pava pueda ingresar dentro de la misma.
Asegurarse que el vapor ingrese dentro de la bolsa durante un período de tiempo que variará de acuerdo con la cantidad y sequedad en la que se encuentre el tabaco a recuperar (a veces se hace necesario repetir más veces la operación).
Se cierra la bolsa durante una hora para que el tabaco pueda absorver la humedad.
Al cabo de una hora el tabaco deberá recobrar el nivel de humedad, cuando esto no ocurra se debe repetir la operación.

Para finalizar un recuerdo para los gauchos que en el pasado se las ingeniaban para conservar el tabaco fabricando una tabaquera con el buche de un avestruz, el buche era sobado hasta adquirir la flexibilidad de una tela. Les daba muy buen resultado para conservar su tabaco.

Muy buenos humos para todos.
Juan Patricio